Frank Cuesta y la doble vara de la opinión pública
La reciente detención de Frank Cuesta en Tailandia por supuesta cría y comercio ilegal de animales silvestres ha generado una ola de reacciones, pero no con la misma intensidad ni el mismo apoyo unánime que otros casos mediáticos. Esto nos lleva a una reflexión incómoda sobre la selectividad de la indignación pública y la influencia de la imagen mediática en la percepción de la justicia.
Frank Cuesta, conocido por su programa "Frank de la Jungla", siempre se ha caracterizado por su pasión por los animales y su lucha contra el tráfico ilegal de especies. Su compromiso le ha llevado a enfrentarse a poderosas mafias y a denunciar la corrupción en Tailandia, un país donde el maltrato animal y la explotación son prácticas comunes.
Resulta llamativo que parte de la sociedad española que durante meses mostró un apoyo inquebrantable a Daniel Sancho, el asesino confeso de Edwin Arrieta, ahora guarde silencio ante la detención de Frank Cuesta.
¿Dónde están esas voces que se alzaban en defensa de Sancho, cuestionando a la víctima y justificando el crimen? ¿Acaso el amor por los animales y la lucha contra la corrupción son menos importantes que la imagen mediática de un "guapito"?
Es innegable que la opinión pública se construye a partir de la información que recibe, y los medios de comunicación juegan un papel fundamental en este proceso. Sin embargo, es responsabilidad de cada individuo analizar críticamente la información y formarse una opinión propia, más allá de las simpatías o antipatías que puedan generar los personajes involucrados.
En el caso de Frank Cuesta, existen muchas dudas sobre la veracidad de las acusaciones en su contra. Su trayectoria y su compromiso con la protección animal son de sobras conocidos. Es necesario que se respete la presunción de inocencia y que se lleve a cabo una investigación justa e imparcial.
Mientras tanto, es importante que la sociedad no caiga en la trampa de la doble moral y que exija justicia para todos, independientemente de su imagen mediática o de la gravedad del delito que se les imputa. El apoyo a Frank Cuesta en estos momentos es fundamental, no solo por él, sino por todos aquellos que luchan por un mundo más justo y compasivo.
