La verdadera Democracia

La democracia es un sistema de gobierno basado en la participación ciudadana, en donde la población tiene el derecho de elegir a quienes los representarán y gobernarán a través del voto. Este sistema fue diseñado para garantizar que todos los ciudadanos tengan la oportunidad de participar en la toma de decisiones importantes que afectan a su comunidad y a su país. Sin embargo, la idea de que un grupo minoritario puede unirse para formar la mayoría es una ilusión peligrosa, que puede comprometer este sistema democrático.

Es común escuchar que "la unión hace la fuerza", pero en la democracia política, esto no siempre es cierto. La democracia consiste en la toma de decisiones en la que todos los ciudadanos tienen derecho a elegir a quienes toman el poder, pero también en el respeto a las minorías y a que sus derechos no sean minimizados. Cuando un grupo minoritario y sus intereses particulares son tratados como si fueran los de la mayoría, se corre el peligro de que la voluntad de la mayoría sea ignorada o incluso anulada. Este no es el propósito de la democracia.

La democracia es más que un simple recuento de votos, es también la garantía de que todas las opiniones sean tomadas en cuenta. No se trata sólo de una mayoría política, sino también de asegurar que las voces de todas las minorías sean escuchadas y respetadas. Sólo así se puede construir y mantener una democracia verdadera e inclusiva, en la que se fomente el diálogo, el debate y la participación activa de cada una y cada uno de los ciudadanos, sean de la minoría o de la mayoritaria.

En resumen, una democracia verdadera implica no sólo el respeto al voto de la mayoría, sino también la protección de las minorías, garantizando que sus derechos y opiniones sean también respetados y reconocidos. En un país moderno, la democracia debe estar presente como una forma de vivir la libertad, la justicia y la igualdad, donde las opiniones de cada una y cada uno de los ciudadanos tengan el mismo peso y la misma importancia. Es tiempo de dejar atrás la falsa ilusión de una mayoría única, para avanzar hacia una verdadera democracia, inclusiva, que abrace las riquezas culturales, sociales y políticas de todas las minorías y grupos que componen nuestra sociedad.

JOSE M. M. CASTELO-APPLETON PhD.
RECTOR