La reunión comenzó con la ponencia titulada "TARTESOS Y EL TÁRTARO", impartida por el Profesor José Velázquez. En ella, se exploraron los sorprendentes vínculos entre la misteriosa civilización de Tartessos y el sombrío concepto mitológico del Tártaro. El Profesor Velázquez fue el encargado de presentar la importancia histórica y mitológica de España en el crisol mediterráneo y europeo, un tema recurrente a lo largo del evento.
Uno de los hilos conductores del congreso fue la exploración de las culturas funerarias de la Península Ibérica y su profunda conexión con las antiguas civilizaciones del Mediterráneo. Se debatió la significativa importancia del color rojo en los enterramientos prehistóricos, desde los hallazgos en Atapuerca hace 430,000 años hasta tiempos más recientes. El Profesor Velázquez argumentó cómo el uso de pigmentos rojos en sepulturas y arte rupestre sugiere un sofisticado culto fúnebre y religioso, posiblemente imbricado con la sangre y el culto solar. Esta hipótesis se reforzó al establecer paralelismos con la disposición de los bisontes rojos en Altamira, insinuando una narrativa ancestral comparable al Libro de los Muertos egipcio.
La ponencia sobre "Migraciones Prehistóricas y Culturas Fúnebres" profundizó en esta conexión, sugiriendo que las migraciones prehistóricas desde la Península Ibérica hacia el "Sahara verde" pudieron haber ejercido una influencia notable en las creencias religiosas y fúnebres de toda la región. Se analizaron las sorprendentes similitudes entre el Tártaro griego y ciertos sitios arqueológicos ibéricos, así como la posible relación entre la mitología griega y la geografía del área del Estrecho de Gibraltar. En este contexto, se destacó la relevancia de la minería antigua en la región como un factor que pudo haber impactado en el desarrollo de estas narrativas culturales y religiosas.
La ponencia titulada "TARTESOS Y EL TARTARO" ofreció una extensa explicación sobre la intrincada relación entre los mitos funerarios del Mediterráneo, la rica cultura egipcia y la propia península. Se discutió cómo los conceptos de Tartessos, la legendaria Atlántida y el temido Tártaro podrían estar intrínsecamente ligados a la geografía y la mitología del sur de España, el norte de África y el enigmático Egipto. El Profesor Velázquez postuló que el origen de estos mitos podría rastrearse hasta la cultura fúnebre y la geografía de la Península Ibérica, estableciendo un vínculo ancestral entre las antiguas civilizaciones mediterráneas y las culturas prehistóricas de la región.
Un punto particularmente intrigante del congreso fue la presentación sobre las representaciones prehistóricas de fantasmas, centrada en una fascinante pintura rupestre en Tasili que mostraba cuatro figuras femeninas con distintivas cabezas de ave. Vicent, tras compartir su experiencia personal al observar pinturas rupestres en una expedición, elogió la presentación. Sin embargo, surgió un debate cuando J. cuestionó la interpretación del Profesor Velázquez, sugiriendo que la pintura podría representar una jerarquía divina o incluso angelical en lugar de espectros. Esta discusión abrió un interesante debate sobre la concepción del alma en la prehistoria y la diversidad de representaciones de divinidades masculinas y femeninas en diferentes culturas.
La reunión concluyó con una crucial discusión liderada por el Rector, centrada en la importancia de evitar el eurocentrismo en el estudio de mitos y culturas antiguas. Se enfatizó la necesidad imperante de adoptar perspectivas globales y cuestionar las suposiciones establecidas que a menudo sesgan nuestra comprensión del pasado. El Rector subrayó la relevancia de examinar culturas no europeas y criticó la aplicación generalizada de conceptos como el chamanismo sin una consideración contextual adecuada. En consonancia con esta visión, el Profesor Velázquez abogó por profundizar en el análisis de las culturas prehistóricas fuera de Europa para enriquecer nuestra comprensión y evitar caer en el eurocentrismo.
Además, se plantearon importantes líneas de investigación futura, incluyendo la necesidad de investigar más a fondo las conexiones entre las culturas mediterráneas antiguas y las culturas de otras regiones del mundo, fortalecer las hipótesis con una base de evidencia empírica más sólida para respaldar las teorías sobre los mitos y cultos antiguos, y considerar activamente las perspectivas de otras culturas y civilizaciones al analizar los mitos y rituales fúnebres.
El congreso "De Raíces y Alas" no solo ilumina las profundas y a menudo olvidadas conexiones entre la Península Ibérica y el mundo antiguo, sino que también subrayó la urgencia de adoptar una perspectiva global y crítica en el estudio de nuestras raíces culturales. Al desenterrar estas complejas relaciones y cuestionar las narrativas eurocéntricas, el congreso sembró las semillas para una comprensión más rica y matizada de la herencia compartida de la humanidad.